Sergio Flores, en hombros en el embudo de Insurgentes I NTR TOROSlinea-punteada-firma1
Todo corazón. Eso fue Sergio Flores. Entrega total. Máxima. Casi épica. En volandas le llevó La México. O fue él quien llevó a Insurgentes al clímax. Qué más da. La esencia fue la misma. Una sublime conjunción que llevó al torero azteca a, posiblemente, su obra más rotunda como matador de toros. Se había hecho acreedor de este paseíllo como triunfador en sus dos paseíllos anteriores de esta Temporada Grande. Tampoco defraudó en el tercero.
El de Tlaxcala cuajó a ‘Feudal‘ de principio a fin. Lo bordó a la verónica. Meció el capote con una suavidad pasmosa. Dulzura deliciosa en más de medio ramillete de lances que pusieron La México en órbita. El quite por tapatías, derroche de originalidad, para entrar acelerar la combustión. El toro, muy encastado, se fue rebrincando y terminó por rajarse más pronto de lo deseado.

Vídeo resumen del festejo en La México I CHARLY LARA – NTR TOROSlinea-punteada-firma1.
Entonces, sacó Flores el alma. Tres cambiados por la espalda y a torear. Lo persiguió hasta su querencia y, ahí, al abrigo de las tablas, le pegó muletazos de todos los colores. Arrucinas, poncinas, pases del desdén, afarolados… Todo un surtido de remates y adornos para engalanar su inteligencia en el toreo fundamental. Le dejó siempre la muleta muy puesta en la cara para evitar mayores huidas y, pese a lo que se abrió siempre el encastado animal, le ligó todas las tandas. Se volcó sobre el morrillo y hundió la espada. Dos orejas. Sin discusión.
El tercero no había sido propicio para Flores. Puso todo de su parte y mostró ese buen concepto que conquistó a la afición española de novillero. Suavidad y temple con las telas. Fiel a esa economía de movimientos suya. Esfuerzo sin premio ante un animal descompuesto y sin una pizca de raza. Embestida parsimoniosa, sin entrega, ni transmisión. El final por manoletinas y una estocada hasta la empuñadura hicieron aflorar algún pañuelo. Ovación.
Pablo Hermoso de Mendoza regresaba hoy a La México, que registra una de sus mejores entradas de esta Temporada Grande para ver en directo al rejoneador español. El navarro se las vio con un cárdeno de Los Encinos que persiguió su montura con bríos de salida. Le permitió encelarlo en un palmo de terreno. Varios recortes jaleados por el tendido. Bien, con las farpas. Quebrando en la cara y clavando reunido. Esos pasajes, sobre ‘Dalí‘, fueron los mejores de una labor que emborronó con el rejón de muerte. Hasta cuatro pinchazos y la oreja, merecida, esfumada.
La suerte suprema volvió a ser el talón de Aquiles de Hermoso de Mendoza.Se repitió la historia. Tras una salida sin fijeza, el cárdeno claro de Los Encinostuvo alegre son y ritmo, pues sacó su buen fondo, eso sí siempre cerca de sus terrenos en las tablas, a medida que avanzó la faena de un Hermoso de Mendoza que lo supo encelar con sus monturas. Momentos de máxima intensidad sobre ‘Disparate‘ que puso ardiendo el embudo de Insurgentes con su ‘hermosina‘. Mantuvo la intensidad con ‘Donatelli‘, pero luego con el toro ya muy acunado en tablas, no acertó con el rejón de muerte y las orejas volvieron a quedar en el limbo.
Ensillado y alto de agujas, el segundo fue un castaño calcetero bien armado. Mostró codicia y celo en los engaños, ya lo cantó enseguida en el quite deSergio Flores por ceñidas chicuelinas. Trató de someterlo de inicio Joselito Adame, que acertó con un torero comienzo por doblones. Exigió lo suyo el deJaral de Peñas, que obligó a la apuesta a Adame. Lo entendió el hidrocálido, firme y asentado, que lo fue haciendo aprovechando su mayor templanza por el pitón derecho. Buenas tandas en redondo, con ligazón y ritmo. Más brusco al natural, por el que no pasó de probarlo. Final volcánico por manoletinas. Lo despachó de estocada atravesada y descabello. Frío el tendido, tan sólo saludó una rácana ovación.
No remontó la tarde en el quinto de Jaral de Peñas, negro listón de buenas hechuras, pero que no tuvo historia. Sin recorrido y a la defensiva, muy descastado durante su paso por el ruedo. Joselito Adame no lo vio claro en ningún momento y, tras probarlo por ambos pitones, no se dio mayor coba. Optó por abreviar, aunque tampoco fue tarea sencilla, porque el animal presentó también complicaciones a la hora de despenarlo.
Hierro de Los Encinos - MéxicoPlaza de toros de La México, México DF (México). Lleno en los tendidos. Toros de Los Encinos (1º y 4º) y Jaral de Peñas, desiguales de presentación. Con más transmisión los dos de rejones y el encastado, aunque aquerenciado, 6º.Hierro de Jaral de Peñas - México
Pablo Hermoso de Mendoza, silencio y silencio.
Joselito Adame, ovación y silencio.
Sergio Flores, ovación y dos orejas.