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Cayetano, en el coso maño de La Misericordia I Cayetano Rivera brindó, antes de comenzar su actuación, la lidia completa de su primer toro de esta tarde en Zaragoza a ‘todos los aficionados de todas las partes por defender y amar este mundo’. ‘Yo estoy dispuesto a morir por el toro y por todo lo que representa, ¿lo están ellos?’, añadió, en referencia a los antitaurinos, antes de coger el camino de chiqueros para recibir al de Juan Pedro Domecq a portagayola.
‘Ojalá esos que se hacen llamar antitaurinos tuvieran hacia las demás personas, como mínimo, el mismo amor y respeto que nosotros sentimos hacia el toro’, comentó también en un impactante y enrazado brindis, en el que se mostró especialmente molesto con los ataques antitaurinos, especialmente, a raíz del festival del pasado sábado en Valencia a beneficio del niño Adrián.
En este sentido, Cayetano quiso dedicarle también unas palabras al pequeño.‘Adrián todavía eres un niño, pero dentro tienes corazón de torero, va por ti, te vas a curar, valiente’, concluyó el torero dinástico, que saludó una ovación desde el tercio tras su actuación.
Al término de la misma, regresó a los micrófonos de TorosTV para ahondar en su brindis con el gesto igual de serio. ‘El toreo es pura verdad, nosotros estamos dispuestos a darlo todo por el toro y creo que eso, por lo menos, respeto’, solicitó al tiempo que también reclamó a la opinión pública‘acercarse e informarse más de este mundo y todo lo que representa… Espero que sirva como punto de inflexión’.
‘Es una tarde emotiva por muchos motivos y después de todo lo que ha sucedido estos días, todavía más aún’, comentó antes de centrarse en su faena, condicionada por el juego del astado de Juan Pedro Domecq: ‘El toro siempre se ha quedado corto y embestía a media altura, sobre todo, a partir del segundo muletazo, pero aún así tenía un punto de transmisión’.