Hubo que esperar al sexto para que Castella acudiera al rescate del mano a mano. También Fuente Ymbro esperó al último capítulo para justificar una tarde en caída libre con un toro notable que propició una faena de cadencia, asentada y notable. No se repitió la historia del pasado año donde salió en hombros con Urdiales y embistieron seis de seis.
El sexto estuvo bien presentado y, a la postre, fue el mejor de un encierro descastado y muy deslucido. Castella firmó una labor espléndida ante un toro con excelente tranco y mucha acometividad. Lo recibió a los medios con un pase cambiado que hizo despertar a los tendidos con una sonora ovación para engarzarlo con un inicio contundente. Las tandas sobre la mano derecha fue magnífica, llevando al toro toreado hasta el final de la cadera, con mucha ligazón y reunido. Sólido y macizo, la faena estuvo enriquecida por una magnífica cadencia y limpieza en cada muletazo. Mató de una estocada y cortó un importante trofeo.
Diego Urdiales ha sorteado en primer lugar un toro con recorrido y fijeza que quiso siempre los medios en el último tercio. Brindó al público una labor de mano baja y bien hilvanada sobre la mano derecha. Hubo momentos en los que se recreó toreando con parsimonia y mucho temple todo en apenas un metro de terreno. El toro fue apagándose paulatinamente y en el final tragó en unos muletazos muy comprometidos. Se alargó y costó mucho cuadrarlo antes de que dejara un pinchazo y una estocada fuminante.
El sobrero de Juan Manuel Criado tuvo buen tranco, galope y fijeza pero se vino abajo a las primeras de cambio. Urdiales basó una labor que no llegó al tendido en la mano derecha. Faltó unidad a la obra para que tuviera trasmisión. Mató de media estocada. No tuvo opciones Urdiales con el tercero al que le faltó repetir. La falta de ligazón y las embestidas desiguales fueron el motivo por el que el riojano optó por abreviar.
No tuvo opciones Castella con el segundo, un toro que siempre embistió de forma defensiva debido a su falta de pujanza. El francés manejó bien el capote a la verónica y le respondió Urdiales con un buen quite. Le dio sitio Castella que se bregó con el animal que llegó muy afligido. Incluso se la jugó al natural donde le pegó varios arreones en una labor meritoria. En cuarto lugar se lidió un sobrero que no mejoró lo que ya había. Bonito de presentación el burraco pero sin raza ni fuerza pues claudicó en varias ocasiones. Castella lo intentó en un inicio por estatuarios pero la faena se diluyó.
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