Diego Ventura cuajó una faena memorable por la que se le saltaron las lágrimas al perder la Puerta Grande por el rejón final. Había sido mérito suyo y del caballo Sueño y también de un bravo toro de Fermín Bohórquez. Era además el sueño de todos ver una salida en hombros. Sí pudo cortar una oreja en el primero, en una tarde en la que el enfrentamiento con Hermoso no supuso tal por el juego de los toros.
Ventura pinchó una buena faena al segundo, otro toro con volumen y seriedad. Lo paró a lomos de Lambrusco, con recortes, y con Nazarí la labor tomó vuelo, llevando al toro muy cosido al estribo. Sobrecogieron los quiebros de Ritz y finalizó con las cabriolas de Remate y las cortas. Le pidieron la oreja y fue concedida.
Iba camino de la puerta grande porque Sueño se había adueñado de la plaza. Primero llevando al toro cosido a la grupa, llegándole a alcanzar en un par de ocasiones, luego con quiebros de frente y posteriormente con quiebros andando para atrás, que impactaron en La Malagueta. Iba camino de producirse el milagro de descerrajar la puerta grande porque firmó una grandiosa obra ante un gran toro. Visiblemente emocionado Ventura dio una vuelta al ruedo. Había pinchado hasta en tres ocasiones antes del rejonazo final y el descabello, y el sueño se desvaneció, porque aunque el público le pidió la oreja, no fue concedida. Sacó a Sueño a dar la vuelta al ruedo con él, ya sin montura, ante una fortísima ovación.
El primero, un toro hondo y cabezón se vino a menos. Hermoso elaboró una faena a la que le faltó transmisión por la condición del animal. Mató de dos rejonazos, el primero defectuoso y fue silenciado. Hermoso tuvo que hacer un esfuerzo en el cuarto, aquerenciado en terrenos de tablas y manso. La labor transcurrió en el tercio, con la dificultad de enfrentarse a un animal que no quiso dar juego. Como broche final colocó un par de cortas a dos manos a lomos dePirata. Pinchó en dos ocasiones antes del rejón final y tuvo que descabellar. Saludó una ovación.
En tercer lugar se lidió un toro de 639 kilos. Manuel Manzanares saludó una ovación tras una labor en la que destacó a lomos de Farruquito y mató de un rejonazo algo trasero. Transcurría la lidia del sexto y Ventura seguía llorando en el callejón. Cerró plaza y feria un toro cuesta arriba al que le faltó motor.Manzanares también pinchó. Y el público se fue soñando la puerta grande.
Hierro de Fermín Bohórquez - EspañaPlaza de toros de ‘La Malagueta’Málaga(Andalucía). Octava y última de la Feria Taurina de Agosto 2016. Más de tres cuartos de plaza. Toros deFermín Bohórquez, de juego variado.
Pablo Hermoso de Mendoza, silencio y ovación.
Diego Ventura, oreja y ovación.
Manuel Manzanares, ovación y silencio.