La cornada al banderillero Mauricio Martínez Kingston marcó el tercer jueves taurino de la Plaza México. El ‘shock’ tras la cornada al torero de plata, una herida en el tórax de pronóstico grave, eclipsó un festejo en el que, por otra parte, no se cortó ningún trofeo. El PaliAlfredo Gutiérrez y Christian Ortega saludaron una ovación cada uno, mientras que Juan FernandoXavier Ocampo y Salvador López escucharon palmas. Se lidió una corrida de San Marcos, de juego dispar.
Alfonso Hernández ‘El Pali’ confirmó alternativa con una faena seria ante un toro manejable, al que instrumentó buenos derechazos. Saludó una ovación, al igual que haría Alfredo Gutiérrez con el segundo. Éste mostró su perfecto dominio técnico frente a un toro que se movió sin excesivo motor y con el que armó una faena de buen tono. Christian Ortega saludó otra ovación por su labor ante el cuarto. Fue quizás la más notable actuación de la tarde, pues el toro tuvo movilidad y clase y el diestro, tras colocar banderillas, desarrrolló un trasteo templado, con buenos pasajes. Falló con el acero.
Fue el quinto de la tarde el toro que prendió a Mauricio Martínez Kingston. Tras el percance, el astado quedó muy orientado y Xavier Ocampo lo pasaportó con celeridad. Juan Fernando había escuchado leves palmas tras lidiar al tercero, con el que mostró buena actitud. En el que cerró plaza, Salvador López se encontró con un toro de escasas opciones con el que hizo un esfuerzo que no fue a más.