Mucho que decir

De la 'proyección y porvenir' de Vistalegre, los titulares dieron paso a 'Presente' en Toledo, 'Triunfador' en Aranjuez, 'Alarde de capacidad' en Santander o 'Poso de figura' en Valencia. Así de meteórico ha sido el recorrido de la temporada del novillero Álvaro Lorenzo. En apenas unos festejos, el toledano pasó de ser uno de los tesoros de mayor proyección del escalafón menor, a convertirse en una realidad.

Álvaro Lorenzo, bien llevado por la fábrica de toreros 'Casa Lozano', ha realizado una campaña en la que ha combinado cosos de responsabilidad, con plazas de rodaje donde ha arrasado. No ha fallado en Vistalegre, Valencia, Santander, Albacete, Salamanca, Dax pero también en Las Matas, Arganda, Villaseca, Sanse, Arnedo o Guadarrama, dando guerra a toda su generación.

Dos tardes marcaron su temporada. Precisamente fueron los dos primeros compromisos del año en los que quiso hacer una auténtica declaración de intenciones: cinco orejas en Vistalegre en el mano a mano con Martín Escudero y cuatro orejas en la encerrona solidaria en Toledo. Después, el nombre de Álvaro Lorenzo dejó de ser un posible para convertirse en una realidad. De gigante. O en Aranjuez donde no se achicó compitiendo con Hermoso y Enrique Ponce. Paseó nada menos que tres orejas y se llevó todos los elogios.

La generación de jóvenes toreros no deja de darnos alegrías. 2016 debe convertirse en la prueba de fuego de Madrid, Sevilla y... ¿la alternativa? Este invierno será el momento de reflexionar hacia donde evolucionará la carrera del toledano. Está en buenas manos.