Video resumen de la gran faena al cuarto de Ponce 
Lo único que le faltó fue la ‘foto finish’. La de la Puerta Grande. Pero tras una tarde soberbia y excelsa, tuvo que abandonar el coso de Almería tras finalizar la lidia del cuarto. Bilbao no podía esperar. Pero Almería tampoco. Cuatro orejas por una tarde portentosa, magistral, de figura. Así fue como Ponce mantuvo otro año más su idilio con Almería, que vivió una intensa apoteosis por dos faenas cumbres. Sí tuvo foto finish en su debut en el coso de la Avenida de Vilches Ginés Marín, que cortó dos orejas de su lote, mientras que El Fandi,no pudo triunfar por su fallo a espadas en un encierro de Juan Pedro Domecqnoble del que destacó el enclasado primero y el bravo tercero, con el hierro deParladé.
Ponce y Almería: el idilio continúa. Elegancia y magisterio. Esas fueron las claves de la gran faena del torero valenciano ante el primer ‘Juampedro’, un toro hondo, pero armónico, muy noble y con calidad al que cuajó de principio a fin en una labor marca de la ‘casa’. Relajo, elegancia y temple a la verónica para después firmar un bello conjunto, con los toques y mando precisos, aderezados con molinetes y adornos que enloquecieron al coso de la Avenida de Vilches. Sólo una media estocada bastó para que el astado cayera fulminante, para que Ponce paseara sus dos primeras orejas.
Pero no acabó ahí su excelsa tarde, y el de Chiva terminó de reventar Almería acabando con otros dos trofeos con fuerte petición de rabo en otra importante faena al cuarto, otro toro noble y manejable al que firmó un elegante quite por chicuelinas para luego comenzar su actuación con la pierna flexionada en una gran labor de maestro, llevando a su altura al toro, al que poco a poco fue haciendo romper en una actuación en la que fue soberbia la puesta en escena, una gran obra culminada con el plato fuerte: sus clásicas Poncinas. Éxtasis colectivo del público, que tras una estocada, pidió con insistente fuerza el rabo, que finalmente no fue concedido. Tras finalizar su actuación, Ponce tuvo que abandonar el coso bajo la debida autorización presidencial al tener que emprender viaje hacia Bilbao, donde está anunciado este viernes.
El tercero de Parladé fue un toro bravo al que dos costaladas de salida le hicieron mella. El inicio de faena de Ginés Marín tuvo belleza y torería, a pies juntos por alto, sacándose al toro a los medios con pases mirando al tendido. Después firmó una labor desigual que terminó con manoletinas y una contundente estocada. Así fue premiado con una oreja.
Al sexto lo saludó a pies juntos Marín, que trató después de hacer romper hacia adelante a un astado noble pero bajito de raza. Pronto tuvo que meterse entre los pitones en una labor en la que también destacaron las luquecinas con que remató el trasteo. Tras estocada casi entera paseó una oreja y abrió la puerta grande.
Enfibrado y con muchas ganas recibió El Fandi al segundo, otro ejemplar armónico y manejable al que el granadino saludó con dos largas cambiadas, varias verónicas templadas y eléctricas chicuelinas. Le formó un lío después en banderillas y le dio fiesta en una faena larga que inició de rodillas llevando el toro a su altura. Su fallo con la espada le dejó sin premio y saludó una ovación tras aviso.
Con mucho brío y de rodillas a la verónica recibió El Fandi al quinto del hierro titular, que mostró falta de fuerza, aunque buena condición, en un saludo muy variado de capa del granadino. Cogió los palos y tras un par a la moviola de gran espectáculo, el presidente devolvió al toro en el tercio de banderillas. El sobrero de El Torreón salió suelto y desentendiéndose de capotes y manseó en el tercio de varas. El Fandi le firmó un vistoso quite por navarras y volvió a caldear el ambiente con su habilidad con las banderillas, aunque tras el segundo par, salió doliéndose del muslo izquierdo. Le aplicaron un spray en la citada zona en el mismo ruedo para paliar el dolor. Visiblemente mermado físicamente, por eso tuvo mérito su faena a un toro que luego fue encastado, que fundamentó en el pitón derecho -el mejor de la res-. Tras pinchazo, estocada y descabello saludó una ovación.
Hierro de Juan Pedro Domecq - EspañaPlaza de toros de Almería. Segunda de abono de laFeria de la Vigen del Mar. Más de tres cuartos de entrada. Toros de Juan Pedro Domecq, y uno de Parladé (4º), bravo, de buenas y armónicas hechuras, nobles y manejables en líneas generales. Con gran calidad el primero. Un sobrero de El Torreón (5º), manso y encastado. Más bajo de raza el sexto.
Incidencias: Al finalizar el paseíllo se guardó un minuto de silencio en memoria de Iván Fandiño.
Enrique Ponce, dos orejas y dos orejas tras aviso y fortísima petición de rabo.
David Fandila ‘El Fandi’, ovación y ovación tras aviso.
Ginés Marín, oreja y oreja.