torero-contraluz-madrid-patiocuadrillas-interior-511-2000
Un repaso especial al escalafón I
173. Esa es la cifra de matadores activos en la temporada europea 2016. Al calor de nuestra estadística, nos adentramos en detalles que deja entrever el escalafón. Pero no hablamos de los de arriba, no esta vez. Bajemos la vista.
De estos 173 matadores con algún festejo de luces esta campaña, un total de 53 solo han hecho un paseíllo. Un dato doble comparativo con 2015: el año pasado hubo cinco espadas más en acción (178), pero también fueron cinco menos (48) los que solo lidiaron toros en un único festejo.
Del año que en Europa ya ‘acabó’ -hablamos de España, Francia y Portugal- quedan nombres llamativos en esa lista. Por ejemplo El Soro (y su tarde en Valencia), Matías Tejela (en Madrid), las reapariciones especiales de Luis Francisco Esplá (Arles), Cristina Sánchez (Cuenca) u Ortega Cano (Benidorm), entre otras vueltas, Lama de Góngora (Valdemorillo), Miguel Tendero (Porzuna), Juan Pablo Sánchez (San Clemente) o Luis Vilches, anunciado en su tierra: Utrera. También el peculiar británico Frank Evans, con su actuación en Benamocarra.
Viendo los números, ‘solo’ 41 espadas han sumado 10 o más paseíllos. Curioso que en 2015 fuese ese número, exactamente 41, los que torearon 10 o más veces. Por debajo de ese umbral simbólico hay nombres propios del toreo escasamente pronunciados este año: Fernando Robleño, Rubén Pinar,Alberto Lamelas o Javier Castaño cumplieron 9 paseíllos, uno más que Juan Leal o Miguel Abellán. Una terna muy sevillana, la que conformarían Antonio Nazaré, Pepe Moral o Borja Jiménez se quedaron en 7, uno más que José Tomás (a quien no sorprende ver en estos puestos sabido el planteamiento de temporada reducida que tiene).
Dejando a un lado los de reciente alternativa, sin tiempo para ganarse demasiados contratos como matadores, sí son más impactantes las cifras deFinito de Córdoba -apenas 6 paseíllos de luces-, El Capea o Uceda Leal con 4, Damián Castaño, Mehdi Savalli o César Jiménez con 3. Por no hablar de la escasa presencia de Eduardo Gallo, Pedrito de Portugal, Sebastián Ritter, David Galán o Cristian Escribano, con solo dos.
En ocasiones, echar un vistazo a lo que nunca se ve del escalafón deja impresiones sorprendentes.